viernes, 31 de mayo de 2013

PERIPECIAS PARA UN SISTEMA INOCUO





Nos forjamos de estímulos y ardemos de pasión,
atropellamos nuestra decencia para socavar al deseo,
meticulizamos la paranoia y desplazamos la conciencia
pues estamos desprovistos de arrebatos celestiales.



Si el cantar de las sirenas nos atrae hacia el peñasco,
y las luces tintineantes del farol nos ciegan el andar,
y el dulce sonido de la flauta nos avienta al acantilado
haciendo que nuestro deseo fulmine la prudencia


¿Cómo quieres que vaya acorde de esta sociedad?
Que mutila a nuestra mente para hacernos presos de nosotros mismos,
que blasfemia nuestras palabras para beneficiarse de nuestro descubrimiento,
que calumnia nuestra postura para doblegarnos al sistema.
 
  
¿Cómo quieres que sea libre y vislumbre mis ideas?
Si hay oídos sordos taponeados por mentiras,
si los ojos están cegados por verdades falsas,
si los labios son lapidados por cintas repetitivas,
y el tacto es meramente un opio sin criterio.


¿Cómo quieres que lea si los medios son parciales?
Como puedo decir si está bien o está mal
si el sistema controla la información al llegar.


¿Cómo podemos vivir en un mundo infernal?
Si la lucha por un poder gobierna a las bestias,
si el mundo busca su propia destrucción
y no rienda a las consecuencias.

 
En un mundo donde la ley no es para todos
y el derecho un privilegio,
las mentiras son las flores de Loto
que al abrirse vierten sinuosas sainetes,
desdoblando el coraje y mutilando la cordura.


 
No es una torre de casino es una torre de cemento
con sólidos cimientos vislumbrado los rascacielos
elaborados del poder mediático de algunos.


¿Qué peripecias a de hacer el victorioso
para resplandecer las lúgubres montañas de oro,
base de estos palacios,
y someter a una igualdad inquebrantable?.


Oh es que éste sistema indestructible
no tiene fecha de caducidad
y su imperio no será como el Romano.


¿Qué mundo le guardará a nuestra descendencia?
¿qué obstáculos les sorteará éste imperio 
que calla a todos y mutila la inspiración?




Blankita Apéstegui